• Los productores autótrofos, vegetales clorofílicos, esencialmente algas en el medio acuático y plantas vasculares en el medio terrestre, constituyen el primer eslabón; crean la materia orgánica del gas carbónico, del agua, de las sales minerales y de fuentes nitrogenadas.
• Los consumidores heterótrofos se alimentan obligatoriamente de materias orgánicas (azúcares, grasas, proteínas) y, consecuentemente, dependen de los productores. Algunos se nutren directamente de los productores, como los animales herbívoros, y se les llama consumidores primarios. Los otros, llamados consumidores secundarios, no se comen directamente a los productores; es el caso de los animales carnívoros.
• Los descomponedores, como los hongos y las bacterias saprofitas, degradan la materia orgánica muerta de la que se nutren y la devuelven al estado mineral por medio de reacciones de respiración y de fermentación.
A continuación, veamos algunos ejemplos de cadenas alimentarias:
En el bosque: roble—oruga—paro (un ave)—gavilán.
En el mar: algas del plancton—copépodos (crustáceos microscópicos planctónicos)— aguja—arenque—cormorán.
Es muy importante conocer estas cadenas alimentarias. Los centros de investigación oceanógrafica intentan reproducir en cautividad peces (robalo o lubina) y langostas, y es fundamental conocer los circuitos de su alimentación para nutrir tanto a las larvas como a los adultos.
Estos datos han permitido dilucidar algunos problemas de contaminación, como la misteriosa epidemia de Minamata, Japón, 1956, no contagiosa y geográficamente limitada. Se derramó metilmercurio, residuo de la fabricación de ácido acético, en el mar a una concentración inofensiva de 0.1 por mil millones, pero este compuesto se fue acumulando en el organismo de los sucesivos eslabones de la cadena alimentaria: algas, copépodos, peces. Su concentración en el eslabón final, el pescado consumido por los pescadores, se había convertido en una dosis 500 000 veces más elevada, ya muy peligrosa. Los enfermos sufrían desequilibrio nervioso; se produjeron unas 43 muertes y numerosos nacimientos de niños anormales.