Cuando el animal se lanza desde lo alto de un árbol estos repliegues se extienden entre las patas anteriores y las posteriores, formando una membrana que funciona como un paracaídas, razón por la cual esta ardilla consigue planear hasta lugares muy alejados mediante un prolongado vuelo. La cola, más bien aplanada, le sirve de timón. Aparte la especie de América del Norte, existen también otras especies de ardillas voladoras en África y en Asia tropical. Las más conocidas son el anomaluro africano y el petaurista asiático.
La ardilla que vuela
Cuando el animal se lanza desde lo alto de un árbol estos repliegues se extienden entre las patas anteriores y las posteriores, formando una membrana que funciona como un paracaídas, razón por la cual esta ardilla consigue planear hasta lugares muy alejados mediante un prolongado vuelo. La cola, más bien aplanada, le sirve de timón. Aparte la especie de América del Norte, existen también otras especies de ardillas voladoras en África y en Asia tropical. Las más conocidas son el anomaluro africano y el petaurista asiático.