La primera operación que realiza la araña es la de inmovilizar a su presa: en efecto, si ésta continuara tratando de soltarse para escapar de la trampa, terminaría por destruir la telaraña. Y he aquí cómo actúa la araña. Después de caer sobre la víctima, la fija a la tela con una gota de sustancia viscosa y luego la envuelve completamente con hilos de seda. Hecho esto, le inyecta veneno que algunas veces es mortal, y otras, sólo paralizante. La comida de la araña queda así lista. Durante horas y horas quedará inmóvil succionando todo el contenido de su víctima, dejando completamente vacía la envoltura externa. Moscas, mosquitos, insectos de todas las especies, ciempiés y otras arañas son las presas particularmente gratas. Resulta curioso el hecho de que cuando la araña se da cuenta de que la presa capturada es demasiado grande, y podría, por tanto, provocar con sus movimientos daños irremediables a su obra, prefiere dejarla libre. Para hacerlo, la araña corta los hilos de la telaraña con que ha tropezado la presa.
¿Por qué teje la araña?
La primera operación que realiza la araña es la de inmovilizar a su presa: en efecto, si ésta continuara tratando de soltarse para escapar de la trampa, terminaría por destruir la telaraña. Y he aquí cómo actúa la araña. Después de caer sobre la víctima, la fija a la tela con una gota de sustancia viscosa y luego la envuelve completamente con hilos de seda. Hecho esto, le inyecta veneno que algunas veces es mortal, y otras, sólo paralizante. La comida de la araña queda así lista. Durante horas y horas quedará inmóvil succionando todo el contenido de su víctima, dejando completamente vacía la envoltura externa. Moscas, mosquitos, insectos de todas las especies, ciempiés y otras arañas son las presas particularmente gratas. Resulta curioso el hecho de que cuando la araña se da cuenta de que la presa capturada es demasiado grande, y podría, por tanto, provocar con sus movimientos daños irremediables a su obra, prefiere dejarla libre. Para hacerlo, la araña corta los hilos de la telaraña con que ha tropezado la presa.