La medusa (agua viva)

La medusa es una forma de invertebrado marino perteneciente al grupo de los celenterados. Con frecuencia es llamada tam­bién "agua viva", pues su cuerpo (compuesto por agua en un 90 por ciento), es como una masa gelatinosa viviente en forma de sombrilla o campana que recibe el nombre de umbrela. Como los demás celenterados, el animal presen­ta simetría radial, cavidad gastrovascular y aberturas únicas. Se diferencia de los póli­pos, en que el individuo no está fijo al sustrato, sino que es nadador activo, propulsado por contracciones sucesivas de la umbrela y ayudado por los movimientos de los tentáculos que cuelgan como filamentos de los bordes del cuerpo, los cuales poseen también propiedades táctiles y actúan como órganos para la prehensión de los alimentos. De la apariencia que le dan esos tentáculos provie­ne su mitológico nombre de una de las Gorgo­nas con cabellera de serpientes, la Medusa que mató Perseo.

La captura de peces u otros animales de que se alimenta la efectúa paralizando la presa con el líquido urticante producido en ciertas células de su epitelio que inocula por me­dio de microscópicos y perfectos aparatos inyectores, que son típicos y exclusivos del grupo de los ce­lenterados, y que con frecuencia se conti­núan dentro de la ca­vidad única o estó­mago.

En ciertos grupos, la forma medusa está permanentemente di­ferenciada en las su­cesivas generaciones, pero otro gran núme­ro ofrece el fenómeno de generaciones alternantes, sexual y asexual. La forma o generación sexual, me­dusa propiamente dicha, es hermafrodita y elabora los elementos reproductores que darán lugar a las larvas, las cuales, en vez de con­tinuar vida libre, se fijan para formar colo­nias de pólipos hidrozoos; en tales pólipos aparecen luego brotaciones o yemas que se desprenden de la colonia y se convierten en una medusa libre. Así se reinicia el ciclo.

Las medusas viven casi siempre en alta mar, en aguas superficiales, y sólo muy raramente a profundidad. Su tamaño varía entre unos po­cos milímetros y varios metros de diámetro. Entre las más pequeñas se encuentra una cu­riosa forma (Craspedacusta) que vive en aguas dulces, originaria de Asia, pero que esporádi­camente aparece en Europa y en la América del Norte, en distintos y apartados lugares. Transcurre un gran número de años entre una y otra aparición en un mismo lugar. Muy recien­temente la existencia de esta pequeña medusa fue descubierta también en la América del Sur, en Chile y en la Argentina.