Universo animal | fósiles |
Los fósiles han llamado siempre, desde la antigüedad, la atención de los hombres. Hoy en día nos sigue sorprendiendo leer en los periódicos noticias acerca del hallazgo de esqueletos pertenecientes a animales prehistóricos. ¿Cómo es posible, nos preguntamos, que los huesos, aparentemente tan frágiles, hayan podido conservarse durante tanto tiempo? Todo depende del terreno que los haya cobijado. Si se trata de un suelo húmedo y acusadamente ácido, los huesos tienen una vida muy breve; en efecto, al poco tiempo se pulverizan y desaparecen. Si se trata, por el contrario, de un suelo húmedo pero rico en sustancias alcalinas, se produce a menudo una perfecta fosilización; es decir, los huesos experimentan una transformación y se petrifican, conservando intacta su forma. Cuando el suelo es húmedo y ácido, pero completamente exento de aire, es posible que se conserven hasta los tejidos de un animal