En los meses de primavera puede suceder que un pajarillo recién nacido se quede sin padres y caiga del nido. ¿Qué podemos hacer en el caso de que nos encontremos con uno? Ante todo hay que facilitarle un nido calientito. Puede utilizarse una caja o un cestito de paja forrado con trozos de lana. Si el pajarito tiene pocos días, necesitará mucho calor, cosa que podremos facilitarle manteniendo encendida sobre el nido una bombilla de 25 W. Hay que colocar el nido en un lugar apartado y, a ser posible, en la penumbra. El problema más grave con el que tendremos que enfrentarnos, para criar a un pajarito huérfano será el de la comida. Una alimentación equivocada podría producirle la muerte inmediata. Pero, más que la calidad, importa la cantidad y el ritmo con que se le administre el alimento. Debe tenerse en cuenta que, en condiciones normales, los pajarillos son embuchados por sus padres cada diez minutos aproximadamente. Si entre las distintas comidas transcurre más de una hora, los pajarillos se resienten de ello. Por lo que respecta al tipo de comida, recordemos que todos los pajarillos comen insectos y gusanos. Los que más les gustan son los gusanos de la harina, pero también pueden usarse las moscas. Para embucharlos hay que utilizar una pinza de bordes redondeados.