La cuestión de la longevidad de los animales se complica incluso entre los animales domésticos por el hecho de que muchos perros y gatos no viven una vida completa, a causa de accidentes y porque muchos son eutanizados por diversos motivos.
Según un estudio realizado hace tiempo, el tamaño de los animales tiende a tener más importancia en la longevidad de una mascota que cualquier otra cosa.
En los perros de razas gigantes, como el Gran Danés y San Bernardo la expectativa de vida es de ocho años.
Para los perros grandes, como el pastor alemán, setter irlandés y el Labrador retriever, la cifra es de unos diez años.
Los perros medianos, como el beagle, terrier escocés y cocker spaniel, llegan a vivir doce años.
Los perros más pequeños, como el caniche toy, Yorkshire terrier y chihuahua, viven alrededor de trece a catorce años.
Lo mismos trece a catorce años son válidos para los gatos. Hay una pequeña diferencia de raza a raza entre los gatos, aunque de los siameses desde hace tiempo se cree que viven un poco más que el promedio.