Hay dos especies de panda en el mundo, siendo ambas especies amenazadas en el medio silvestre en que viven. El panda gigante es fácil de reconocer, por las manchas negras alrededor de cada uno de los ojos, oídos y otras partes del cuerpo. Los pandas gigantes sólo se encuentran en China y el Tíbet. Tanto la dieta de ambas especies de panda consta en su mayoría de tallos de bambú, hojas y brotes. Los pandas gigantes suelen consumir cerca de 80 libras (36,4 kg) de bambú cada día. Los pandas también comen miel, huevos, pescado, naranjas y plátanos cuando están disponibles. Suelen pasar alrededor de 16 horas al día comiendo. Cada una de las patas del panda poseen un pulgar y cuatro dedos. El pulgar es utilizado principalmente para sostener el bambú mientras lo come.
La altura media de los pandas gigantes alcanza de cinco a seis pies de alto (152,5 a 183 cm), o la altura de un humano promedio. Su peso es mucho mayor, el panda promedio llega a pesar hasta 276 libras (125,5 kg). En China, se cree que los pandas fueron una vez el animal más preciado en el en el jardín de animales exóticos del emperador. Estudios moleculares han demostrado que el panda gigante es un oso de verdad y que forma parte de la familia Ursidae.
La otra especie, el panda rojo, se encuentra comúnmente en Bután, China, India, Myanmar y Nepal. Los pandas rojos se les encuentra en los bosques de coníferas húmedos, incluso en las pendientes más pronunciadas de las montañas del Himalaya. Los pandas rojos son vistos como animales vulnerables por los activistas de vida silvestre. Al igual que el panda gigante, la mayor parte de la dieta del panda rojo se compone de bambú. Sin embargo, los pandas también comen bayas, setas, bellotas y una gran variedad de hierbas. La altura media del panda rojo es de aproximadamente 24 pulgadas (61 cm). El panda rojo llega a pesar 13 libras (5,9 kg).