Universo animal | perros | animales domésticos | La caza deja sobre el suelo un olor apenas perceptible; pero el perro de caza tiene un olfato tan desarrollado que, husmeando la tierra, sigue las huellas de la presa y conduce a su dueño hasta el lugar donde se esconde el animal.
Gracias a este olfato tan fino el perro puede reconocer el olor dejado en el suelo por la liebre o por el ciervo, por ejemplo, lo cual le permite encontrar las huellas de la caza. El cazador no tiene más que seguir al perro para llegar al refugio o al escondite del animal perseguido. Esta aptitud del perro es utilizada por la policía para encontrar niños perdidos, personas desaparecidas y alguna vez incluso a los asesinos o fugitivos de la ley.