Pero, es por sus dotes de "inteligencia", por lo que el caballo significó siempre un valioso auxiliar: aprende fácilmente, tiene memoria, demuestra apego a su dueño y evidencia mansedumbre o rebeldía, acorde con el trato que recibe. En nuestro campo, una manada pacientemente agrupada es un ejemplo de disciplina y docilidad, así como los caballos acostumbrados al trabajo en los rodeos proceden con tal soltura y precisión, que sus actos tienen carácter de iniciativas coincidentes con los movimientos que necesita realizar el jinete.
El caballo, la más noble conquista del hombre
Carácter del caballo
Georges-Louis Leclerc, Conde de Buffon, el célebre escritor y naturalista francés, decía que el caballo era la más noble conquista del hombre. No hay duda de que por su fuerza, ligereza y docilidad, constituyó para el hombre el instrumento que simplificó sus más pesadas tareas y le sirvió de eficaz medio de transporte.
Pero, es por sus dotes de "inteligencia", por lo que el caballo significó siempre un valioso auxiliar: aprende fácilmente, tiene memoria, demuestra apego a su dueño y evidencia mansedumbre o rebeldía, acorde con el trato que recibe. En nuestro campo, una manada pacientemente agrupada es un ejemplo de disciplina y docilidad, así como los caballos acostumbrados al trabajo en los rodeos proceden con tal soltura y precisión, que sus actos tienen carácter de iniciativas coincidentes con los movimientos que necesita realizar el jinete.
Pero, es por sus dotes de "inteligencia", por lo que el caballo significó siempre un valioso auxiliar: aprende fácilmente, tiene memoria, demuestra apego a su dueño y evidencia mansedumbre o rebeldía, acorde con el trato que recibe. En nuestro campo, una manada pacientemente agrupada es un ejemplo de disciplina y docilidad, así como los caballos acostumbrados al trabajo en los rodeos proceden con tal soltura y precisión, que sus actos tienen carácter de iniciativas coincidentes con los movimientos que necesita realizar el jinete.