Tarántulas

Universo animal | tarántulas |  Las apasancas o arañas peludas, llamadas también migales, son las arañas más grandes de to­das las conocidas; son muy temidas por los indí­genas de los países cálidos americanos donde se encuentran, a causa de su ferocidad y aspecto. Su picadura es fatal para los insectos y animales peque­ños, como pajarillos; el vulgo la considera peligro­sa para el hombre, aunque realmente, no le produce daño alguno, a pesar de ser dolorosa.
   En Europa, existen otras arañas de un grupo se­mejante, pero de menor tamaño, llamadas tarántu­las, que causan gran temor entre la gente del campo por su picadura. Realmente, la fama de estas ara­ñas es mucho peor que sus hechos, pues su picadura no es más grave que la de una abeja o avispa. Era creencia popular que la única curación contra la picadura de una tarántula la proporcionaba la música alegre, que inducía a la víctima a bailar hasta caer exhausta y bañada en sudor. De esta creencia, nació el nombre de tarantella, que se aplicó a un baile italiano agitadísimo, muy típico del pueblo napolitano, en que la velocidad del ritmo se incrementa hasta adquirir extraordinaria rapidez.
   Las verdaderas tarántu­las se encuentran en Euro­pa meridional y en algu­nos lugares de América del Norte, donde se llaman arañas lobo, pero el nom­bre se aplica equivocada­mente a muchas otras ara­ñas grandes de otras partes del mundo. Las tarántulas viven debajo de las rocas y los troncos, o en madrigueras, profun­das, tapizadas por la fina seda que segregan las pe­queñas glándulas serígeras que el animal tiene en el abdomen. Las tarántulas no tejen telas para atrapar a sus presas, sino que las aguardan como el tigre, escondidas entre hojas y detritos vegetales, en los bosques o dentro de sus propias guaridas. Cuando algún insecto des­prevenido pasa, se precipitan sobre él y lo inmovi­lizan con su picadura, para arrastrarlo después hasta sus madrigueras. El veneno mata a la víctima o la paraliza, y la reduce a la impotencia. Las tarántulas no mastican ni tragan la substancia de sus presas, sino que les chupan la sangre y los demás fluidos orgánicos de su cuerpo.
   La mayor de todas es la migale de la Guayana, que es la más grande de cuantas arañas se conocen, al extremo de alcanzar de 7 a 10 centímetros. En América del Norte, vive una especie más pequeña. La tarántula verdadera de Europa es la Lycosa narbonensis; la americana es la Lycosa hettuo; la migale de Guayana es la Theraphosa leblondi, y la de Estados Unidos y México, Theraphosa aviculare. Estos animales son arácnidos del orden de los araneidos. Las diversas especies del género Lycosa pertenecen a la familia de los licósidos, y las mi­gales, son de la familia de los aviculáridos.

Tarántula

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