¿Cómo un perro ayudó a encontrar las pinturas rupestres de Lascaux?


Un día de 1940, cinco jóvenes estaban cazando conejos en las colinas cerca de la ciudad de Montignac, Francia. El perro que habían traído con ellos, llamado Robot, de repente desapareció. Los chicos comenzaron a buscarlo en una colina llamada Lascaux. De pronto oyeron los ladridos de Robot y siguieron su sonido hasta un pequeño agujero en la colina, el perro había caído en este agujero y no podía salir.

Uno de los muchachos entró al agujero a buscar al perro, lo que encontró fue una cueva a varios metros de la superficie. Cuando encendió un fósforo, no podía creer lo que veía. A su alrededor, en las paredes de la cueva había pinturas de caballos, toros, ciervos y otros animales. Lo que el muchacho no supo en aquel momento era que estas pinturas fueron la obra de hombres primitivos que vivieron en la región ¡hace más de 15.000 años!

Las pinturas rupestres de Lascaux, Francia son probablemente las pinturas rupestres más famosas del mundo. Cada año la gente viene de todas partes del mundo para ver las obras de arte realizadas por sus remotos antepasados. Estas pinturas fueron hechas mucho antes de que las primeras ciudades aparecieran en la Tierra.

Sin embargo, las pinturas de Lascaux no son las pinturas más antiguas en el mundo, o incluso de Francia. No muy lejos de Lascaux, un bloque de piedra fue encontrado con figuras de animales que los científicos creen que datan de alrededor del año 25.000 antes de Cristo.