Destrucción del hábitat de los animales
Como las poblaciones humanas crecen, es inevitable que ocupen espacios para vivir y trabajar. La gente construye casas y fábricas en lugares donde los animales viven. La desecación de tierras húmedas y la deforestación son ejemplos de esta amenaza.
Sobreexplotación de los recursos naturales
La gente puede pescar un determinado pez o cazar un animal hasta que los números de éstos son demasiado bajos para reproducirse adecuadamente rápido. Los bisontes antes pastaban libremente en las Grandes Praderas hasta que fueron llevados al borde de la extinción en el siglo XIX. Afortunadamente ahora están protegidos por la ley y sus números se están incrementando.
Especies no nativas que compiten con los animales ya establecidos
Las especies no nativas son plantas y animales que han sido traídos por humanos a áreas donde originalmente no se encontraban. En estos lugares por lo general no encuentran enemigos naturales y pueden expulsar a las especies que si son nativas.
Contaminación del medio ambiente
La polución en el aire, agua, y tierra afectan a los animales y las plantas. Los puede envenenar o hacer dificultoso que crezcan o se reproduzcan. Las fábricas no son la única fuente de ésto. El aceite, la sal y otras sustancias rociadas o arrojadas en los caminos pueden llegar a los ríos y lagos. La lluvia ácida daña y mata los árboles, especialmente en las montañas donde nubes ácidas y la neblina se estacionan.
Fuente: World Almanac
