El bulldog no debe confundirse con otras razas como el bulldog americano o el bulldog francés, que son similares en apariencia.
A pesar de su famosa expresión de fiereza, los bulldogs son generalmente dóciles y se pueden mover muy rápido en distancias cortas.
Los bulldogs obtuvieron su nombre debido a que fueron criados especialmente para hostigar a los toros (bulls).
Este era un "deporte" en el que un toro era encadenado a un poste, y varios perros eran soltados para atacar al toro. Esto sucedía mientras los espectadores observaban y aplaudían.
El deporte fue declarado ilegal en 1835, y desde entonces los criadores comenzaron a eliminar los rasgos de crueldad y falta de miedo de estos perros para que la raza pudieran vivir como animales de compañía.
La crianza fue un éxito, y ahora se puede confiar en que cualquier bulldog será dulce con los miembros de la familia, incluso con un toro.