El llamado diablo espinoso es un reptil que habita en el desierto australiano. Se caracteriza por tener el lomo recubierto de aguijones que desalientan a los posibles depredadores. Además, consigue el agua de una forma poco común: cuando se acumula agua de lluvia o rocío en su espalda, le fluye por surcos hasta las comisuras de la boca y se la bebe.
Un diablo espinoso es capaz de comerse 3.000 hormigas al día.