Muchos animales usan sus orejas para perder calor de sus cuerpos. En este caso, la mejor respuesta a la pregunta puede ser un elefante africano, porque sus grandes orejas, en realidad, son lo más parecido a un abanico, en el mundo animal. Son más grandes aún, que las de su pariente cercano el elefante de la India, que también vive en un lugar caliente, pero permanece más tiempo en la sombra. Estas dos enormes bestias, que son los animales terrestres vivientes más grandes (el elefante africano es el más grande), también se enfrían chapoteando en el agua y rociando agua sobre su cuerpo con la trompa.