Universo animal | roedores | ratas | Con sus aproximadamente 5 centímetros de longitud (10 con la cola), esta locuela necesita moverse constantemente, por lo que la veremos correr horas y horas en su jaula, sin dar la menor muestra de cansancio. De vez en cuando se detiene para comer un poco, y después reanuda sus juegos. Vive bien en compañía de otras ratitas sobre todo cuando es joven.
Si pretendemos criar a una pareja, debemos pensar en lo que haremos con las ratitas que nazcan. Podemos regalárselas a amigos o familiares, o bien ponernos de acuerdo con algún vendedor. Lo importante es que no nos encontremos con tan gran número de ratitas que no sepamos dónde colocarlas. Debemos saber que una pareja de ratitas blancas puede dar a luz de 5 a 10 veces al año, y que en cada una de ellas nacen aproximadamente una decena de crías.
He aquí algunas normas fundamentales para la crianza: la rata blanca come de todo, pero su mejor dieta está integrada por una papilla de avena (10 partes) y mijo (1 parte), molida y mezclada con agua. De vez en cuando hay que añadir a la papilla una cucharada de aceite de hígado de bacalao, o algunas gotas de vitaminas especiales, que podemos adquirir en las tiendas de animales. Una vez a la semana se le puede dar fruta, lechuga o achicoria. No es aconsejable el queso, porque fermenta en seguida. Hay que quitar todas las sobras antes de que se pudran, para evitar peligrosas infecciones y enfermedades.