¿Otra definición de los anfibios?

   Las ranas y sapos pertenecen a la clase anfi­bios, nombre que grosso modo significa "ani­males que llevan doble vida". Por consi­guiente, tendemos a pensar que pasan la mitad del tiempo en agua y la otra en tierra. De hecho, algunos, como la rana de uñas, pa­san toda su vida en el agua, y en el otro extre­mo hay otros, como la rana de la isla Stephens, de Nueva Zelanda, que nunca aban­dona la tierra; lo mismo rige para 80 especies diferentes, que se encuentran en Nueva Gui­nea e islas adyacentes, y otras 4 en Australia. Todas ellas, cuando no se encuentran en el agua, deben vivir en lugares húmedos para que la evaporación a través de su piel se vea compensada por la absorción de agua por la misma vía, cuando no se desplazan llevando consigo su propio suministro de líquido. Los anfibios no son, pues, animales que pasan la mitad de su tiempo en agua y la mitad fuera de ella, sino, más bien, aquellos adaptados para autoproveerse de agua, tanto si se en­cuentran en ella como si no. Fuera del medio líquido, sin embargo, los anfibios que viven en los desiertos pueden perder un volumen de agua equivalente a un tercio de su peso sin que ello signifique necesariamente la muerte.