La lluvia de las cigarras

   Lluvia artificial en los trópicos
   Como otras especies del orden hemípteros, las cigarras tienen las piezas bucales adaptadas para pinchar y succionar la savia de los tallos y de las yemas. La mayor parte de esta savia está compuesta por agua y azúcar, de manera que las cigarras deben succionar importantes dosis de esta savia para obtener una dieta adecuada. El resultado es que excretan gran­des cantidades de una solución débilmente azucarada. En los trópicos hay tantas cigarras que a veces parece que esté lloviendo debajo de un árbol de la selva, aunque el cielo está despejado; esto se debe a que las cigarras están comiendo en el árbol, y la lluvia consiste en gotas de agua azucarada, excretadas por ellas.
   Los jóvenes insectos ápteros o ninfas, que viven enterrados, extraen la savia de las raíces de la misma manera.