La jirafa vive sólo en África; más aún: no en toda África, sino en una zona que se extiende entre el paralelo 15° norte y el paralelo 20° sur. Preferentemente se encuentra en las zonas cubiertas por hierbas y donde hay árboles —de preferencia acacias— de una cierta altura, para poder alimentarse cómodamente con sus hojas. No se encuentra en la selva, donde la vegetación tupida obstaculizaría una fuga, y menos en las sabanas formadas sólo por hierbas, porque el alimento no estaría cerca de su boca.