Pingüinos del sur

PINGÜINO DE BARBIJO


El pingüino de barbijo (Pygoscelis antarctica), como todos los pingüinos del mismo género Pygoscelis, tiene particulares hábitos de vida. En caso de peligro esta ave, que también es débil en la natación, se dirige hacia tierra, aunque el peligro venga del mar comúnmente trata de alcanzar los puntos más elevados del terreno. No se sabe qué instinto impulsa a este animal a emplear esta táctica defensiva. De cualquier modo es evidente que los terrenos ascendentes aspiran bastante confianza al pingüino de barbijo, el cual, cuando se siente próximo a morir, llega hasta la cima de pequeñas colinas.



MEGADIPTE DE LOS ANTÍPODAS


No obstante el nombre de "gran pingüino" que se da al mejor conocido como pingüino de ojos amarillos (Megadyptes antipodes), se trata de pingüino de dimensiones medias, ya que mide solamente 75 centímetros de longitud total. Anida al sur de Nueva Zelanda.



EL PINGÜINO EMPERADOR


Esta clase de pingüinos (Aptenodytes forsterí), después de las largas incursiones en el mar abierto, se aproxima a la costa justamente en el período más frío; las tormentas de nieve y los fuertes y helados vientos que llevan la tempera­tura hasta a 50 y 60 grados bajo cero, no constituyen nin­gún obstáculo para estas extrañas aves. Acostumbrados a resistir los más terribles rigores del clima antartico, los pingüinos viven tranquilamente, pescando y construyendo sus nidos, soportando impasibles las mayores tempestades.
Por otra parte, tienen tareas importantes que cumplir en tierra firme: la puesta de huevos, la incubación y el cuidado de las crías. Llegados al lugar de la incubación, se colocan uno cerca del otro en colonias de varios millares de ejemplares. La gran masa de animales hace elevar la temperatrura, al menos en el interior de la colonia; los que se encuentran en el exterior, y por tanto los más expuestos al frío, por turno entran más adentro del grupo, mientras que sus puestos son tomados por otros.



PINGÜINO DEL CABO


Esta especie (Spheniscus demersus) es realmente la más conocida entre los esfenisciformes. En efecto, es la que comúnmente se exhibe en los jardines zoológicos del mundo. El pingüino del Cabo, llamado también pingüino de Jakass, mide unos sesenta centímetros de largo total. Se adapta también a climas templados, por cuanto vive en zonas que no son excesivamente frías; anida en la parte meridional de África y a veces hasta en Natal y Angola.