¿Cómo es la anatomía de los crustáceos?

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cangrejo ermitaño - crustáceo
cangrejo ermitaño
   Entre los crustáceos se encuentran ani­males de aspectos y tamaños muy varia­dos, aunque examinados con detalle, muestran muchos rasgos comunes. Al igual que los insectos, son animales arti­culados, pues su cuerpo está segmenta­do y rodeado por una capa más o menos gruesa de quitina. Esta cubierta cambia periódicamente, según crece el animal. La muda tiene lugar normalmente una vez al año, en el mes de julio. La coraza se rompe por la linea media dorsal y por el interior de las patas, con lo que el crustáceo sale arrastrándose de la arma­dura, que se le ha quedado pequeña. Durante las dos semanas siguientes, se mantiene bien escondido hasta que la nueva coraza se torna dura y resistente.
   El cangrejo ermitaño no tiene caparazón en el abdomen. Para protegerse, busca una concha vacia adecuada a su tamaño y mete en ella la parte posterior de su cuerpo. Cuando crece y la concha se le queda pequeña, busca otra de mayor ta­maño y se muda rápidamente a ella. Los crustáceos poseen un gran número de patas. Se supone que sus antecesores tenían un par de patas en cada segmento y que éstas se han especializado actual­mente de distintas formas. En la cabeza se han convertido en dos pares de ante­nas y varios pares de piezas bucales; en el resto del cuerpo, en pinzas, patas o aletas. Los ojos están a veces sobre pe­dúnculos móviles. Las antenas tienen órganos olfatorios y de equilibrio. Du­rante su desarrollo, los crustáceos pasan por varias etapas. Los cirripedos, que permanecen fijos, p. ej. las bellotas de mar y algunos crustáceos parásitos, cambian notablemente cuando son adul­tos, aunque se puede reconocer que son crustáceos siguiendo su desarrollo. La gamba del Mar del Norte tiene la carac­terística de ser hermafrodita; durante su primer año de madurez sexual actúa como macho; el resto de su vida, como hembra.
   La langosta y algunos cangrejos de mar son crustáceos superiores. Su variedad de especies es tanto mayor cuanto más baja sea la latitud en la que vivan.
   Los crustáceos más pequeños pertene­cen a los grupos inferiores, que forman parte del plancton marino. Entre ellos, los copépodos son los más numerosos; con ellos viven también formas larvarias de muchos otros crustáceos.
   Los crustáceos son muy importantes pa­ra la economía de la naturaleza, prin­cipalmente como parte básica de mu­chos ciclos alimentarios, tanto en el mar como en el agua dulce. Los crustáceos del plancton viven de algas microscópi­cas y son comidos por muchos otros animales del mar.