¿Qué hacer cuando el perro pierde el pelo?

  La época del cambio de pelo cons­tituye un período bastante delicado para el perro. Debemos tratarle con dulzura y permitirle que dé saluda­bles paseos por los prados, para que pueda revolcarse por la hierba y librarse del pelo viejo. Además he­mos de peinarle con un adecuado peine de metal, para que no se vea obligado a rascarse a más y mejor: cuanto más largo tenga el pelo, tan­to más rato habrá que peinarle. Deberemos hacerlo todos los días mientras dure el período del cam­bio, que suele prolongarse por es­pacio, de unas dos semanas. Des­pués le tendremos que procurar los habituales cuidados higiénicos. En la alimentación deberemos aumen­tar las comidas grasas: mantequi­lla, manteca de cerdo, tocino (la parte interior, no salada) y aceite de oliva o de semillas para condimen­tar el arroz escurrido. Un perro de tamaño mediano puede ingerir sin peligro alguno de 100 a 150 gramos de grasas por día. Pero debemos procurar que no superen el 15 % de su alimentación total.